En
la década del 60 con la llegada del color a la televisión Norteamericana, EL
SANTO fue sin dudarlo, una de las series más vistas y famosas en todo el mundo,
convirtiendo a su protagonista Roger Moore en un verdadero ídolo.
Su apariencia de playboy irresistible
para las mujeres, acompañado de su inteligencia y dotes de detective, hacían
del personaje de Simón Templar uno de los más carismáticos en la historia de la
televisión.En los 118 capítulos emitidos entre 1962 y 1969, mostraban a EL SANTO como un acaudalado Playboy Británico de la alta sociedad, que tenía como afición resolver misterios e intrigas, ayudando a los pobres y desvalidos contra las injusticias de los poderosos, a los que ayudaba para llevarlos a la cárcel.