14 de abril de 2014

EL BUZON.

Una testigo de nuestra ciudad que de a poco se fue despidiendo habiendo cumplido un ciclo.
Un testigo que durante décadas permaneció en el mismo lugar y forma parte de nuestros recuerdos, como el tranvía, los viejos cafés y boliches que había en cada barrio, y un sin número de cosas que desaparecieron en los últimos cuarenta años, para situarlos en un espacio de tiempo.



GALATEA Y GERONIMO.

Un paréntesis en un nuestras duras tareas de mascotas.