LAS TRES CARABELAS, esa pizzería que alguna vez te conté, se encontraba en la esquina de Laprida y Acevedo.
Era un lugar estupendo para degustar la mejor pizza de todo Lomas de Zamora en la década del 60 y 70.
El local era enorme con mesas y boxes de madera junto a las enormes ventanas, donde en un ambiente familiar la gente concurría durante todo el día a consumir esas pizzas espectaculares.
Cuando tenias un manguito de mas en el bolsillo, te podías comer una Copa Melba que era enorme y era la especialidad en postres de la casa.
En verano te podías sentar en la vereda bajo el toldo de aluminio que cubría toda la esquina, donde había unas mesas redondas con sillas de mimbre, y allí podias tomarte unas cervezas con maní con cascara y el clásico triolet.
Te juntabas con amigos y charlabas horas y horas mientras él transito bastante importante para la época pasaba por la calle Laprida que en aquel entonces era adoquinada.
Era un lugar estupendo para degustar la mejor pizza de todo Lomas de Zamora en la década del 60 y 70.
El local era enorme con mesas y boxes de madera junto a las enormes ventanas, donde en un ambiente familiar la gente concurría durante todo el día a consumir esas pizzas espectaculares.
Cuando tenias un manguito de mas en el bolsillo, te podías comer una Copa Melba que era enorme y era la especialidad en postres de la casa.
En verano te podías sentar en la vereda bajo el toldo de aluminio que cubría toda la esquina, donde había unas mesas redondas con sillas de mimbre, y allí podias tomarte unas cervezas con maní con cascara y el clásico triolet.
Te juntabas con amigos y charlabas horas y horas mientras él transito bastante importante para la época pasaba por la calle Laprida que en aquel entonces era adoquinada.