Siempre me atrapó la magia y sus interpretes, es imposible que alguien no se cautive frente a un buen truco de magia.
Magos, ilusionistas o como lo quieras llamar, atesoran todo el misterio de sus trucos.
Los tiempos fueron cambiando como todo, hoy los espectadores están mas pendientes en adivinar como el mago hace el truco, que disfrutarlo, hasta hay un programa que expone como se hace cada truco.
En nuestro país hay muy buenos ilusionistas, pero hay uno que para mi es único, y es René Lavand, quien nació el 24 de Setiembre de 1928, vive desde muy chico en la ciudad de Tandil y es un especialista en la cartomagia.
René Lavand realiza sus ilusiones con la única ayuda de su mano izquierda, ya que perdió la derecha en un accidente cuando sólo tenía nueve años.
Lejos de dejarse derrotar por tal circunstancia, Lavand practicó la cartomagia obsesivamente desde su infancia hasta alcanzar un completo dominio de la baraja.
La atracción de los espectáculos que realizó durante toda su carrera, no se basan solamente en la asombrosa manera en que maneja las cartas, sino también en las historias que relata en cada truco, escritas en su mayoría por sus amigos Rolando Chirico y Ricardo Martín, historias con las que viste sus ilusiones.
Trabajó durante muchos años como bancario, hasta que a los 32 años en 1961, luego de ganar una competencia de mágica en la especialidad llamada manipulación, se lanzó como profesional actuando en la televisión y teatros Argentinos.
Es reconocido en Estados Unidos, Europa y Japón, fue artista de la televisión Estadounidense, realizando además espectáculos privados y conferencias para sus colegas, desde mediados de los ochenta.
Su juego más famoso es la versión que realiza de un clásico de la cartomagia llamado "Agua y aceite"; en él utiliza una de las frases que definen su arte, "NO SE PUEDE HACER MAS LENTO".
Otra de sus frases en las presentaciones en televisión, al enfrentar algún plano de cámara es, "LA CÁMARA IMPLACABLE, NO ME DEJA MENTIR"
La clave de su arte es añadirle belleza al asombro y la búsqueda de la belleza en la simpleza.
LO RECUERDO DESDE SIEMPRE.
ADIOS.
LO RECUERDO DESDE SIEMPRE.
ADIOS.