Travolta era una actor en ascenso gracias a algunos papeles televisivos y alguna incursión en cine en papeles secundarios.
Apenas apareció en las salas de cine, la película se convirtió en uno de los films más exitosos de 1977.
El público hizo suyas las vivencias de Tony Manero, quien se convirtió en un referente de la juventud de los setenta.
Sin duda, otro de los puntos fuertes de la película, lo que terminó convirtiéndola casi en un clásico cinematográfico, es su banda sonora, casi toda realizada por los Bee Gees.