Después de mas de 50 años de funcionar de manera continua, cerró sus puertas el kiosco de la esquina de Arenales y Alberti que a principios de la década del 60 había abierto Carmen y Pierino.
Desde aquel entonces el negocio pasó primero a manos de uno de los hijos del matrimonio, siendo este quien le vendió el fondo de comercio a unos amigos, que mantuvieron abierto el comercio hasta Diciembre del año pasado.
De esta manera termino la historia de un comercio que como tantos o en el barrio fueron cerrando.
Las razones no se si vale la pena analizarlas, porque lo importante es, que aquel Kiosco que abriera Carmen y Pierino, donde compre mil golosinas y otras tantas cosas durante mi niñez y adolescencia ya no esta.
De esta manera termino la historia de un comercio que como tantos o en el barrio fueron cerrando.
Las razones no se si vale la pena analizarlas, porque lo importante es, que aquel Kiosco que abriera Carmen y Pierino, donde compre mil golosinas y otras tantas cosas durante mi niñez y adolescencia ya no esta.