12 de mayo de 2014

EL BARON ROJO.

Si bien este Post no responde a la esencia del Blog, siempre es bueno publicar algo sobre temas para muchos poco conocidos. 
Me interesa mucho todo lo publicado sobre la Primera Guerra Mundial debido que mi abuelo paterno formo parte del Ejército Italiano en el cuerpo de Bersaglieri.
Ayer Domingo estaba disparando el control remoto de la tele de canal en canal, y estaban pasando una película sobre la Aviación Francesa en este primer conflicto bélico a nivel mundial.
En ese momento recordé al legendario Barón Rojo símbolo de la Aviación Alemana sobre el cual se han escrito decenas de historias volcadas en infinidad de artículos y libros.
Manfred Albrecht Freiherr von Richthofen había nacido el 2 de Mayo de 1892 en la Capital de Silesia – Breslavia (hoy Wroclaw, perteneciente a Polonia)
Era el mayor de tres hermanos pertenecientes a una familia aristocrática, donde el padre había a ocupado un alto cargo en el Regimiento de Ulanos Nº 12,  unidad perteneciente a la poderosa Caballería Prusiana.
Manfred y su hermano menor  quisieron seguir los pasos de su padre, alistándose muy jóvenes en el Ejército Imperial donde completo su adiestramiento como cadete incorporándose a los Ulanos, siendo nombrado tres años más tarde Teniente del primer regimiento.
Durante la Primera Guerra Mundial, Von Richthofen pasó de la caballería donde ganó la condecoración de la Cruz de Hierro, a la infantería, pero en este cuerpo no prosperó.
Finalmente encontró su lugar alistándose en la aviación, donde demostró una gran capacidad en esta arma, completamente innovadora para lo que hasta entonces había sido la guerra.
Nunca logró destacarse en la Academia de Aviadores, pero sí lo hizo cuando comenzó a participar en los combates.
Su encuentro con otro gran aviador, Oswald Boelcke, fue decisivo dado que este lo seleccionó para el Escuadrón de Caza Jagdsstaffel, y en su primer combate tuvo una destacadísima intervención.
Durante los primeros meses se destacó por su agudeza visual y su innato don para afrontar el peligro, donde su personalidad se transformaba cuando tomaba los mandos de su avión.
Durante los meses siguientes se destacó como el mejor piloto de la Aviación Alemana, donde llego a superar el número de aviones derribados en combate al mismísimo Boelcke, quien fuera su referente.
En 1917 se lo confirió como Comandante del Jasta 11, que luego fue conocido como el "Circo Volador" por los vivaces colores que presentaban los 14 aviones que formaban la escuadrilla.
Se ganó el apodo de Barón Rojo porque su avión estaba pintado de ese color para que sus rivales lo reconocieran; hábil maniobra psicológica, pues sus enemigos le temían pero admiraban su gran destreza como Piloto de Guerra.
Llegó a dirigir 58 misiones con total éxito, en las cuales derribó a unos 80 aviones, algo que nadie llegó a superar en ningún bando durante el resto de la guerra.
En mes de Abril sumó él solo 20 derribos, sus hombres insinuaban que su líder tenía un comportamiento suicida, y pocos meses después recibió el encargo de dirigir la primera ala de caza de la historia aérea, la JG 1, integrada por los Jasta 4, 6, 10 y 11.
El 6 de Julio de 1917 recibió una bala perdida en el cráneo, que le provocó una terrible herida lesionándole el cerebro; pero él continuó volando pese a estar claramente incapacitado para soportar las alturas.
Llevó vendada la cabeza durante mucho tiempo y poco después recibió para piloteara un Fokker DR. I, un triplano que también pintó de rojo, y que tenía gran agilidad, aunque si se mantenía en rumbo fijo durante muchos minutos, se convertía en presa fácil.
Según las fuentes oficiales, fue el Capitán Canadiense Roy Brown el que consiguió matar al Piloto Alemán, aunque nuevas investigaciones apuntan a que fue el Soldado de Infantería Australiano William John Evans el que disparó desde tierra la bala del 303 que acabó con la vida del legendario piloto.
La bala le habría entrado por el lado derecho del pecho y le causó heridas en los pulmones, el hígado, el corazón antes de salir, y según la opinión de los Médicos Forenses, apenas contó con un minuto antes de perder la consciencia y solo un par de ellos en morir.
Poco se sabe sobre el Soldado Evans, quien murió en 1925 y probablemente falleció sin imaginar que él podía ser el causante de la muerte del Piloto más famoso en la historia de la Aviación de Guerra.
Fue enterrado con todos los honores militares por los mismos Soldados Británicos, quienes le rindieron tributo, y su ataúd fue llevado sobre los hombros de seis miembros del Escuadrón 209.
En el momento del entierro, Soldados Australianos presentaron armas y lanzaron tres salvas en su honor.
En su lápida que se encuentra en el mismo lugar donde fue derribado, se puede leer un epitafio que dice:
Aquí yace un valiente, un noble adversario y un verdadero hombre de honor. Que descanse en paz.