Hace unos días estaba escuchando la radio y el conductor traía como tema, "¿Que recuerdos teníamos de nuestros abuelos?"
Fue él quien comenzó hablando de su abuelo como combatiente de la primera guerra mundial.
En ese momento, me vinieron a la mente montones de historias que me había contado mi abuelo José que también había combatido en ella.
Mi abuela recordaba siempre que con 18 años recién cumplidos al abuelo José lo habían reclutado.
Prestó servicios como soldado en el Cuerpo de Bersaglieri que era un Batallón de Elite del Ejército Italiano.
Prestó servicios como soldado en el Cuerpo de Bersaglieri que era un Batallón de Elite del Ejército Italiano.
Él era huerfano de padre y madre y vivía un poco de prestado en casa de unos tíos.
Este programa que escuchaba, me impulsó un poco a recordar porque había comenzado la guerra, los sucesos y las consecuencias que dejó.
La principal causa del comienzo del conflicto bélico fue la rivalidad entre las principales potencias europeas, en particular entre Inglaterra y Alemania, que venían disputándose el comercio en el mundo y los territorios.
El conflicto estalló cuando el 14 de junio de 1914 el heredero al trono Austro-Húngaro, Francisco Fernando, fue asesinado en la ciudad de Sarajevo capital de Bosnia por un estudiante Serbio.
El emperador Austro-Húngaro apoyado por Alemania, culpó a Serbia por el atentado.
Los Serbios eran aliados de Rusia que a su vez eran aliados de Francia.
Pocos días después Alemania le declaraba la guerra a Francia e invadía Bélgica, lo que provocó la reacción inglesa y su entrada en el conflicto bélico.
De esta forma comenzaba la Primera Guerra Mundial, en la que se enfrentaron dos bloques, por un lado Rusia, Francia, Gran Bretaña, a la que más tarde se sumarían Italia en 1915 y los EE.UU. en 1917; y por el otro lado, Alemania, Austria-Hungría y Turquía.
En muchos países los sindicatos y los partidos obreros se opusieron al conflicto porque consideraban que era una guerra puramente comercial y que los trabajadores no tenían nada que ganar en ella y muchísimo para perder.
Frente a estas protestas, los gobiernos lanzaron fuertes campañas de propaganda con la intención de que la gente viera en la guerra una causa nacional.
Esto despertó ciertos fervores nacionalistas pero que se fueron diluyendo a lo largo de los cuatro años que duró uno de los conflictos armados más sangrientos.
La guerra se fue desarrollando en distintos frentes, pero dos fueron los más importantes y donde se produjeron la mayoría de los combates, el frente oriental Rusia y el Occidental Francia y Bélgica.
Durante el conflicto se usaron nuevos recursos bélicos mortíferos, como el gas asfixiante que provocaban daños irreparables, modernas ametralladoras y tanques de guerra.
Durante los tres primeros años la guerra parecía desenvolverse en un eventual empate entre los bloques enfrentados, pero esta situación cambió en 1917 con la incorporación de los Estados Unidos al bando aliado que compensó con creces la retirada de Rusia del conflicto.
A mediados de 1918 los aliados vencieron en Amiens a los Alemanes, en Septiembre a los Austro-Húngaros en Italia y en Octubre a los Turcos en Medio Oriente.
En Enero de 1919 los países vencedores se reunieron en el palacio de Versalles cerca de París. Y acordaron las nuevas fronteras europeas y el pago por parte de los vencidos de indemnizaciones de guerra por los daños causados durante el conflicto.
Alemania perdió sus colonias y debió desmantelar su flota, reduciendo considerablemente su ejército.
Francia recuperó las regiones de Alsacia y Lorena y el Imperio Austro-Húngaro quedó desintegrado y surgieron nuevas naciones como Checoslovaquia, Yugoslavia y Hungría.
