Siempre digo que hay cosas que me han acompañado
toda la vida, cosas simples como comprar un paquete de las clásicas pastillas
DRF.
Un montón de marcas hicieron pie en el mercado, las
HALLS, MENTHOLYPTUS y otras tantas, pero para mí las DRF son insustituibles.
Hoy la empresa aumentó su propuesta sumando a sus variedades tradicionales de
menta, anís y mentol, las de naranja, limón y la nueva de menta sin azúcar.
DRF pertenece al
portfolio de Bonafide, y desde 1914 está posicionada como la pastilla más
reconocida de la Argentina.
Para muchos y me incluyo se ha convertido en una marca tradicional que no pierde vigencia pese al paso del tiempo.
Para muchos y me incluyo se ha convertido en una marca tradicional que no pierde vigencia pese al paso del tiempo.
DRF fue fundada en 1914, y su dueño Darío Rodríguez de la Fuente comenzó a
producir las pastillas de menta y las bautizó con las iniciales de su apellido,
alcanzando gran popularidad entre el público consumidor de la época.
Pensaba, cuantos paquetes me habré
comido en mis primeros años de fumador para que cuando llegara a casa, mi vieja
no se diera cuenta que había estado fumando.
Un toque de perfume y un par
de pastillas de menta en la boca y SANTO REMEDIO.