Desde los
años 20 y hasta los 60 del siglo pasado Paker estuvo siempre en los primeros
puestos en lapiceras en todo el mundo, hasta que a partir de la década del 60
la pluma estilográfica fue desplazada por los bolígrafos que invadieron el
mundo.
En los
primeros años de la fabricación de estas lapiceras los fabricantes tuvieron que
resolver el problema del lento secado de la tinta una vez depositada sobre el
papel.
Este
inconveniente los llevo a desarrollar la producción de una tinta de secado
rápido y mucho más brillante que llamo Superchrome", esta estaba destinada
al modelo más exitoso de la marca, la Parker 51.
Sin embargo
esta tinta no dio el resultado esperado, debido a la mayor densidad que tenia terminaba
ensuciando las plumas y atascándolas.
Esto sumado
al elevado precio de venta que tenía, la empresa la dejo de fabricar continuando
con la tradicional tinta Quink.
Las fábricas
de estas lapiceras, durante muchos años
estuvieron repartidas en países como Canadá, Reino Unido, Dinamarca, Francia, México
y Argentina.
Los que
conocen de estas lapiceras, coinciden que el modelo 51 fue el más exitoso
porque revolucionaba estéticamente lo existente hasta el momento.
Lo
distintivo del modelo era su pluma oculta que era de Oro de 14 kilates,
sobresaliendo de ésta solo la punta.
También
reemplazo el cierre tradicional a rosca por el cierre a presión del capuchón,
estilizando todo el cuerpo hasta darle una forma de bala.
También las había
enchapado en oro guiloché y acero platil con un clip en forma de flecha dorada,
muy estilizado que se convirtió en distintivo de la marca.
El primer
sistema de carga era el utilizado en su modelo "Vacumatic",
consistente en un pistón oculto en el lado opuesto a la pluma, que llenaba por
presiones sucesivas.
Posteriormente
este sistema se reemplazó por el que denominó "Aerometric", más
sencillo y eficaz, al cual se accedía desenroscando todo el cuerpo trasero, lo
que descubría una camisa de metal con una lengüeta de acero lateral que se
oprimía varias veces.
La Parker 51
se convirtió en un obsequio muy apreciado por médicos y otros profesionales que
lo recibieran, y la lucían con un cierto orgullo, combinando el concepto de
instrumento de escritura con el de joya.
Parker Pen Company, adquirió a
la firma Eversharp que era otro fabricante de lapiceras estilográficas y
lápices automáticos de alta jerarquía de Estados Unidos, que a su vez había
adquirido la firma Argentina Birome inventora y fabricante del bolígrafo.
Con esto
Parker logro deshacerse de dos competidores serios e importantes y contar con la patente que le permitiera
fabricar en Estados Unidos el bolígrafo, e instalarse en la Argentina
utilizando la planta y las oficinas de Birome.
Durante un
tiempo siguió produciendo las clásicas lapiceras estilográficas con la marca
Eversharp, en modelos económicos para luego discontinuar la marca.
En 1976
Parker adquirió la compañía Mampower cuando el mercado de trabajadores
temporales estaba comenzando.
Hubo épocas
en las que Manpower daba más beneficios que el propio negocio de las plumas
estilográficas.
Una decisión
comercial movió la sede central de la compañía a Newhaven –Inglaterra.
En Mayo de
1993 Parker fue adquirida por Gillete propietaria también de la marca PaperMate,
uno de los principales vendedores de bolígrafos a nivel mundial y la célebre Waterman, que se fabricaba en
Francia de origen Estadounidense como
marca "top".
Con el
correr de los años, Gillete vendió su división de escritura a Newell
Rubbermaid.
La división Sanford de esta es la más grande del mundo en este segmento, con marcas como Rotring, Sharpie, Reynolds, Parker, PaperMate, Waterman y LiquidPaper.
La división Sanford de esta es la más grande del mundo en este segmento, con marcas como Rotring, Sharpie, Reynolds, Parker, PaperMate, Waterman y LiquidPaper.